La pareja convivía hacía más de treinta años en una vivienda de barrio Solís Pizarro. Una noche llegó el imputado de 60 años. Se acercó a la denunciante y comenzó a insultarla y a amenazarla. Le mostró un cuchillo y le dijo: “Mirá lo que tengo aquí, con estoy te voy a matar uno de estos días”. La mujer se encerró en la habitación, con llave. Entonces el acusado se dirigió al cuarto de su hija y también la insultó y amenazó.
En un juicio abreviado, el sujeto fue condenado a un año y dos meses de prisión condicional como autor del delito de amenazas con arma.
En el fallo, el acusado resultó sobreseído del delito de amenazas por prescripción de la acción penal. El juez Eduardo Raúl Sángari, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio, le dictó además una serie de reglas de conducta que deberá cumplir durante dos años, como prohibición de ejercer actos de violencia de cualquier tipo contra su grupo familiar. Además, le ordenó realizar tratamiento psicológico por sus impulsos violentos, previo diagnóstico de un profesional idóneo.