Los delincuentes presentaron comprobantes de transferencias bancarias falsificados, lo que permitió que los empleados procesaran transacciones que parecían completamente legítimas.
El fraude pasó desapercibido en un primer momento, pero la irregularidad fue detectada poco después, dejando al descubierto el robo.
Ante este hecho, la Librería Lerma presentó una denuncia formal ante las autoridades policiales, quienes ya iniciaron la investigación para identificar y dar con los responsables de esta estafa.
A través de sus redes sociales, desde el establecimiento solicitaron la colaboración de la comunidad, pidiendo que cualquier persona que pueda reconocer a los estafadores o aportar información útil se acerque a ayudar. "Toda ayuda es muy valiosa", publicaron desde la librería.