Pablo González, nuevo intendente de la ciudad de Orán, dialogó con Salta Comparativa, y se refirió al estado en el que encontró al municipio tras 12 años de gestión de Marcelo Lara Gros. “Es un serio desorden” comenzó señalando el jefe comunal.
En este marco indicó que todavía están en periodo de evaluación de estado, pero que hasta el momento encuentran una estructura colapsada, con una sobrepoblación de empleados y sin el espacio físico necesario para que realicen sus tareas. “Hay 17 inmuebles alquilados para la Municipalidad y están todos separados. Toda la Municipalidad está separada, y es ineficiente” dijo.
Consultado sobre la cantidad de empleados, y los rumores de despidos en el municipio, dijo que no será así, y aclaró que llevarán adelante una reorganización. “El 80% del gasto total que tenemos es por sueldos, y tenemos un pasivo que no podemos terminar de calcular” lamentó.
A la vez criticó a su antecesor, y contó que la precariedad laboral que se vive en la ciudad es tan grande que hay oficinas municipales que no tienen computadoras, sino que todavía se manejan con máquinas de escribir.
