En el hospital San Bernardo, el gobernador Gustavo Sáenz supervisó las carpas de internación reducida que se instalaron sobre calle Mariano Boedo para asistir a pacientes de Covid-19 con casos leves y moderados. “Seguimos trabajando para fortalecer el sistema de salud en toda la provincia”, expresó el mandatario.
En la carpa hay capacidad para 60 camas que cuentan con oxígeno, aire acondicionado, atención médica y enfermería.
Este servicio funcionará desde hoy como soporte para pacientes con coronavirus, mientras se tramitan camas en otros nosocomios.
Se amplía de este modo la capacidad de atención del hospital San Bernardo durante la pandemia, asistiendo a pacientes menores de 65 años que lleguen estables con saturación de oxígeno mayor al 90% y sin signos de agotamiento respiratorio.
A la llegada del paciente, se evaluará su cuadro para determinar si precisa internación y se le brindará el soporte vital inicial, con oxígeno y medicamentos.
En esta carpa trabajará personal del nosocomio y del Sistema de Atención Médica para Emergencias y Catástrofes (SAMEC).