La causa inició a raíz de la denuncia de la titular del local de cobro de servicios contra una empleada que se desempeñaba como cajera, quien mediante maniobras fraudulentas habría realizado diversas operaciones en las que cobraba a clientes facturas de diferentes empresas, desviando lo recaudado hacia a su propia cuenta o a la de terceros con los que mantenía ciertos vínculos.
Su accionar habría quedado registrado por las cámaras de seguridad del local comercial y fue reflejado en los movimientos bancarios realizados. El monto total de estas transferencias superó los 4 millones de pesos, generando un importante perjuicio económico para su empleadora.
En este contexto, durante la noche del día jueves, con intervención del Juzgado de Garantías N° 3, los investigadores procedieron a la demora de la implicada, una mujer 26 años y a la identificación del resto de los involucrados.