Los inspectores también detectaron bichos y que los empleados estacionaban sus motos al lado de las bolsas de harina, lo que puede provocar una contaminación cruzada con los alimentos producidos.
Además, se labró el acta de infracción por no contar con el Certificado de Aptitud Ambiental Municipal y por falta de higiene.
Si bien es la primera vez que se clausura esta fábrica, según información extraoficial, en inspecciones anteriores solamente se hicieron recomendaciones de medidas a corregir. Esta vez, los incumplimientos fueron más graves por lo que se procedió a realizar una infracción y la posterior clausura.
Queda a la empresa solucionar los incumplimientos ambientales y de control comercial, además de pagar la multa que el juez de faltas considere pertinente.
Atentos a esto, se recomienda a la comunidad evitar el consumo de todos los productos bajo la marca en cuestión, ya que hasta el momento de la infracción se pudo haber producido la mercadería en malas condiciones, según lo publicado en El Tribuno.
