La aduana argentina fijó un precio de referencia de US$53 el kilogramo para las exportaciones de carbonato de litio para evitar la subfacturación y mejorar la transparencia, según la agencia tributaria federal, pero al parecer esto generó varias críticas.
Al respecto Salta Comparativa dialogó con Alberto Castillo, responsable de Remsa en Salta, quién explicó en primer lugar que el valor del litio en el mundo se encuentra librado a lo que establezcan las empresas ya que no se trata de un commodities. “Todas las empresas producen para autoabastecerse, y es muy difícil que una empresa venda a otra” indicó, y agregó que cada empresa establecía un valor.
“El problema se radicó porque una empresa de Catamarca fijo el valor del kilo de carbonato de litio en seis dólares, y otra de Jujuy en 52 dólares, lo que generó un fuerte ingreso económico en Catamarca que fue advertido por Nación” señaló Castillo. En este marco el Gobierno se metió en este mercado y fijó nuevas reglas para la exportación.
“Esto fue una medida inconsulta con las provincias” lamentó Castillo, quién manifestó que son las provincias las titulares de los recursos naturales que se encuentran en sus territorios, por lo que no debería existir una decisión tan arbitraria desde Nación
