El desabastecimiento de gasoil en el norte el país afecta distintas actividades, no sólo a la concreción de la cosecha gruesa, sino también a procesos industriales cuya generación de energía eléctrica es a partir de este combustible, proyectos mineros, servicios públicos como ambulancias, recolección de residuos, móviles policiales, etc.
Esto, redunda en una diferencia de costo entre mercado interno y externo, que perjudica a las petroleras (YPF, Shell, Axion). Y a esto se agrega el faltante de buques a nivel mundial.
Días atrás Gustavo Saenz manifestó en Asamblea de Gobernadores del Norte Grande que "las empresas transportistas eligen abastecer el centro del país y no venir al norte, justamente por temor a no poder regresar por la falta de gasoil. Es un círculo vicioso nunca visto, y por eso también estamos gestionando con los funcionarios de transporte para que nos brinden una solución urgente”.
En el día a día se ve replicado lo mismo, ya que playeros de una estación de servicio del macrocentro salteño aseguró que no los están abasteciendo como ellos necesitan: “Nos está llegado poco gasoil”, es por eso que optaron por cargar con un tope de $3.000 por vehículo.
