Pedía alimentos con su hijo en la calle, y tras un confuso episodio terminó detenido: fue condenado

El 5 de junio de 2024, dos profesionales de la Secretaría de primera infancia, niñez y familia de Salta acudieron a un local de venta de hamburguesas del centro luego de tomar conocimiento de que en el lugar se encontraba una pareja junto a dos niños pidiendo dinero y comida a los transeúntes. Llevaban allí varias horas.

Al llegar encontraron solo al imputado, con un menor de alrededor de tres años en brazos. Hablaron con él y les respondió en tono agresivo diciendo que no les iba a dar ningún dato y las echó del lugar. Luego se dirigió a la esquina de Urquiza y Alberdi y desde ahí les hizo señas con las manos indicando que les iba a cortar el cuello.

Las dos mujeres le informaron a un superior de la secretaría acerca de la situación y se ordenó activar el protocolo establecido y llamar a la policía.

Tres uniformados llegaron al lugar y el sujeto salió corriendo con el niño en brazos y se tiró en el asfalto delante de un taxi. Los efectivos lo levantaron, lo llevaron a la vereda y el acusado intentó escapar nuevamente, golpeando la cabeza del menor contra un vehículo que pasaba. Finalmente forcejeó con los policías, que lograron tomar al niño y resguardarlo.

El sujeto fue denunciado y llegó a juicio. Fue condenado a un año de prisión efectiva como autor de los delitos de amenazas y resistencia a la autoridad, en concurso real.

El juez Leonardo Gabriel Feans, vocal de la Sala I del Tribunal de Juicio, revocó la condicionalidad de una pena anterior dictada al acusado y unificó ambas condenas en el monto de tres años de prisión efectiva. Ordenó el traslado del sujeto a la Unidad Carcelaria 1.

En el mismo fallo, el imputado fue absuelto lisa y llanamente del delito de lesiones.