En un control realizado por efectivos de la Sección “Senda Hachada”, que depende del Escuadrón 52 “Tartagal”, efectuaron la requisa de un automóvil particular que funcionaba como remís trasladando dos pasajeros.
Cuando los gendarmes registraron el equipaje de los ciudadanos, detectaron dos mochilas, donde se ocultaban 13 “ladrillos” característicos a los utilizados para el traslado de estupefaciente, los cuales contenían una sustancia blancuzca.
Luego de que integrantes de Criminalística y Estudios Forenses confirmaran resultado positivo para cocaína, los uniformados incautaron un total de 13 kilos 605 gramos y detuvieron a ambos involucrados.
Intervino la Fiscalía Federal de Tartagal.