El caso, según lo informado desde la Fiscalía Penal 6, ocurrió en una vivienda del barrio La Paz, en la zona sudeste de la ciudad, a donde dos policías, un cabo y un agente se hicieron presentes en respuesta a un llamado de la propietaria, quien alertó sobre la posible presencia de un ladrón en la casa.
Los policías, en el móvil 1.101, llegaron al domicilio alrededor de las 4.30 del jueves pasado, y tras dialogar con la dueña, Carolina Flores, procedieron a realizar una requisa en la vivienda, pues la vecina indicó que había escuchado ruidos y había personas sospechosas que merodeaban por los alrededores.
Para recorrer la propiedad, Salinas explicó que los dos policías se dividieron y tras finalizar la requisa no encontraron a nadie, por lo que optaron por retirarse. Cuando los policías se marcharon, la dueña de casa advirtió que faltaba su teléfono celular, el que había quedado sobre una mesa, por lo que volvió a llamar a la comisaría 17 de barrio Solidaridad.
En vista de ello, un coordinador del área se presentó en la casa y tras tomar conocimiento de la sospecha de que el teléfono fue sustraído por alguno de los dos policías que llegaron a la casa, se inició una investigación a fin de determinar qué sucedió con el aparato.
Requisa
Bajo directivas de la fiscalía, los policías realizaron posteriormente una requisa a los dos policías en cuestión. Entre las pertenencias del agente, se encontró una batería de las mismas características de la marca del teléfono robado a Flores.
Más tarde, en tanto, otro efectivo al ir al baño de la dependencia policial encontró el aparato robado, por lo que sus superiores colocaron en el mismo la batería hallado en poder del agente, y resultó que la misma correspondía a dicho aparato.
Ante esta situación, el agente, identificado como David Pedro González, reconoció haber tomado ilegalmente el teléfono de la casa de Flores, por lo que de inmediato se produjo la detención del suboficial, como así también el secuestro del teléfono en cuestión.
La fiscal informó que se llevó adelante la correspondiente audiencia de imputación en contra del agente por el delito de hurto calificado agravado por la función de policía del acusado, no obstante, recuperó su libertad con medidas sustitutivas por haberse recuperado el celular. Asimismo, se declaró el caso como flagrante y bajo proceso sumarísimo.