Miembros del Cuerpo de Investigadores del CIF, de UDEC y del GOPAR realizaron desde esta madrugada un importante operativo dirigido por la fiscal Penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Ana Inés Salinas Odorisio, en el marco de la investigación que lleva adelante por cientos de estafas en contra de la firma Saulo Capital SRL.
A la madrugada fueron allanados cinco domicilios –cuatro en la ciudad de Salta y uno en Santa Victoria Oeste- en el que fueron detenidos una mujer y tres hombres, entre ellos un sargento de la Policía de Salta, a disposición de Recursos Humanos.
En las viviendas allanadas en la capital de la provincia, ubicadas en los barrios Miguel Aráoz, Altos de San Bernardo, Morosini y Santa Victoria, fueron secuestrados dinero en efectivo, cuentas de criptomonedas, automóviles, celulares y documentación de interés para la causa.
Además, fueron allanados diez comercios vinculados a la firma Saulo Capital SRL.
La causa
La fiscal de UDEC investiga unas 500 denuncias en contra de la firma Saulo Capital SRL, por haber generado mediante contratos celebrados entre la empresa y los damnificados, una rentabilidad de dinero que fue convenida fuera de las previsiones reguladas por entidades financieras y Mercado de Valores en Argentina.
De acuerdo a las denuncias, distintos ciudadanos -motivados por difusiones de inversión con plazos cortos de retornos de intereses, superiores a los ofrecidos en los mercados de tipo formal y regulados-suscribieron contratos o actas acuerdo en las que se les prometían inversiones de dinero en moneda nacional y/o extranjera (dólares estadounidenses). Según los contratos presentados por los damnificados, luego de 180 días le devolverían el capital más un 140% y 180% de ganancias, dependiendo del capital a invertir. Otras de las previsiones sugerida por la empresa, consistía en ofrecerles un contrato por 4 y 6 meses con una remuneración del 17,6% del capital invertido y, si un mes antes se quería retirar el dinero, el inversor debía avisar con antelación y de no ser así se continuaría pagando sin ser necesario renovar el contrato (renovación automática).
Conforme a las actas acuerdo aportadas por los denunciantes se observó que unos de las clausulas estipulaba que: “El solicitante aportará a la empresa, en fecha XXX, la suma de $ XXX en concepto de aporte de capital, a efectos de formar parte de ella, en calidad de socio”.
Es decir que el dinero que recibían de los denunciantes era invertido en negocios del mercado local. Las ganancias producidas fueron empleadas para devolver, con intereses, el dinero a varias de las víctimas; por lo menos hasta el cierre de la sede de Saulo en Salta.
Desde UDEC determinaron que los responsables de la empresa Saulo Capital SRL, tendrían en administración un Pool de comercios, que fueron fruto de la inyección de capitales captados a través de la financiera encubierta que administraban los involucrados.
La empresa publicitaba mediante páginas en web y difusiones masivas de inversores iniciales, mostrando solvencia económica y montando así una estructura y actividad sumamente rentable creando un contexto propicio para quienes avizoraban altos y rápidos retornos.