El juez de la Sala I del Tribunal de Juicio de Tartagal Reinaldo Burgos condenó a un hombre de 72 años por ser autor de los delitos de abuso sexual simple agravado por el vínculo; abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo; coacción en contexto de género en concurso real y corrupción de menores agravada en concurso ideal.
El hombre cumplirá la pena de trece años de prisión efectiva y será inscripto en los registros correspondientes de condenados por delitos contra la integridad sexual.
El acusado se desempeñaba como locutor en medios de comunicación en esa ciudad, aunque actualmente se encuentra jubilado. La denuncia la radicó su nieta, ya mayor de edad, y contó que su abuelo la sometía a abusos sexuales desde que tenía 6 años hasta cumplir los 12. Dijo que le practicaba sexo oral y la obligaba a hacerle lo mismo a él. Agregó que también la hacía ver pornografía y le pedía que se bañaran juntos.
