Una encuesta de la Unión industrial Argentina (UIA) reflejó este lunes que el 66% de las empresas del sector consideran que es un mal momento para invertir en bienes de capital. Hace un año el porcentaje era del 46%, mientras que en enero de 2022 solo el 25% pensaba que en esa línea.
En un contexto de caída brutal de la producción y las ventas, las firmas ven al aumento de los costos y al derrumbe de la demanda como los principales problemas. Asimismo, también aparecen como impedimentos para el impulso de la industria manufacturera la contracción de obra pública y la falta de financiamiento.
De acuerdo con el relevamiento realizado por el centro de estudios de la UIA en abril, más de la mitad de las empresas industriales tuvieron tanto una caída tanto de la producción como de las ventas al mercado interno en comparación con el trimestre previo. De este modo, se trata de los segundos peores indicadores de los últimos años, solo superados por los datos que surgieron en la encuesta de enero.
En paralelo, el 37% tuvo una baja de sus exportaciones y el 24% experimentó una reducción de los puestos de trabajo. El dato de empleo fue el único que logró empeorar el número de enero.
Por otra parte, la crisis industrial tiene como correlato que la proporción de empresas que tuvo dificultades para hacer frente a todos los pagos trepó de 7% a 12%. Los mayores problemas se verificaron para el pago de impuestos, aunque también hubo inconvenientes en el pago a proveedores, de compromisos financieros, servicios públicos y salarios.
Con todos estos números, cerca del 60% de las compañías asegura que se encuentra peor que hace un año, pero casi el mismo porcentaje espera que la situación mejore de acá a un año.
