Existen muchos mitos con respecto a la temperatura del motor. Lo principal que debemos tener en cuenta es que el factor fundamental en juego es la lubricación. Las piezas mecánicas que lo componen, están sometidas a esfuerzos, impactos, y sobre todo a fricción y rozamiento entre superficies. Aquí nace la principal tarea del aceite, lubricar y así reducir el desgaste que genera este rozamiento.
La evolución exponencial de tecnología en aceites, no solo nos garantiza hoy prolongar la vida útil de estas piezas, sino que también permite que los propulsores sean cada vez más eficientes, en relación a su cilindrada y la potencia que son capaces de entregar.
El primer mito que existe en épocas invernales es tener que dejar en marcha el motor durante varios minutos antes de poner el vehículo en movimiento, algo que puede resultar más perjudicial que benéfico, y debemos entender por qué. En primer lugar, saber que el tiempo máximo que toma el circuito de aceite en lubricar todo el motor es de 30 segundos, aún en condiciones de temperatura bajo cero. En segundo lugar, entender el efecto de condensación que se produce en las paredes de los cilindros, sometidos a bruscos cambios de temperatura. Cuando el motor arranca, la mezcla combustible que ingresa está enriquecida, y esto tiene el propósito de lograr aumentar la temperatura de la cámara de combustión en el período más corto posible de tiempo.
Es por estas razones que le aseguramos al usuario que en esos 30 segundos iniciales el motor ya está listo para funcionar, y le recomendamos ser cuidadoso solo los primeros minutos de movimiento con las RPM, no acelerarlo a velocidades de giro mayores a las necesarias, pero si acelerarlo normalmente, esto se resuelve en mayor ingreso de combustible y por consiguiente menor tiempo de trabajo en frío.
Retomando el tema actual sobre la puesta en marcha del motor con bajas temperaturas, les brindamos información sobre los beneficios de circular correctamente y queremos abarcar también los perjuicios que se ocasionan al dejar el vehículo en marcha varios minutos antes de ponerlo en movimiento. Como mencionamos respecto a la lubricación, basta con esperar máximo 30 segundos para que todas las piezas estén lubricadas, y en cuanto a la combustión, existe un fenómeno denominado “calor latente de vaporización”, que como su nombre indica, es la transformación del estado líquido a vapor de un fluido.
En el caso de la nafta, al ingresar al cilindro frío, parte del volumen se adhiere a las paredes del cilindro y se mantiene en estado líquido, generando contaminación dentro del Carter, ya que el pistón al bajar va a arrastrar parte del combustible. Por ello hacemos hincapié en no dejar el motor en ralentí esperando que el marcador de temperatura de agua comience a subir, sino comenzar a moverlo suavemente pero con el pie sobre el acelerador, promoviendo así un mayor ingreso de combustible que reducirá el tiempo en el cual la nafta se vaporice correctamente y la temperatura aumente para un trabajo eficiente.