El Gobierno refuerza el operativo antipiquete porque, tras la convocatoria de gremios e hinchas de clubes de fútbol, considera “política” la marcha de los jubilados. El Ejecutivo sostiene que hará “todo lo que permite la ley” para mantener la movilización dentro de la plaza del Congreso.
Según pudo saber TN, el operativo contará con más de 850 agentes de la Policía Federal, Gendarmería, Policía de Seguridad Aeroportuaria y Prefectura junto con los efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. “Pongan 100 o 100.000 personas, son los mismos que quieren desestabilizar la gestión desde hace un año”, expresan en Nación.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ordenó también controles en los accesos a la Ciudad para filtrar el ingreso de colectivos que asistan a la marcha. La Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) participará del proceso. “Si no tienen habilitación, no entran. Si encontramos a alguien con pedido de captura, lo detenemos”, agregan en el oficialismo.
En Balcarce 50, aseguran que aplicarán el operativo de Tribuna Segura, que se implementa en las inmediaciones de los estadios de fútbol cuando hay eventos deportivos. Abarca controles a las personas para evitar el ingreso de armas e identificar individuos con restricciones de admisión y pedidos de captura.
El Gobierno asegura que detendrá a todas las personas que “incurran en conductas que afecten la seguridad” y confirma que les aplicará la Restricción de Concurrencia Administrativa a todo evento deportivo. El Ministerio de Seguridad mantiene que se respalda en el artículo 94 del Código Penal.
El texto expresa que “será reprimido con prisión de tres meses a dos años todo el que impidiere, estobare o entorpeciere el normal funcionamiento de los transportes por tierra, agua o aire o los servicios públicos de comunicaciones, de provisión de agua, de electricidad o de sustancias energéticas”.
La Casa Rosada reconoce que busca evitar el enfrentamiento de las fuerzas de seguridad con los jubilados y asegura que las medidas apuntan a evitar disturbios por parte de los hinchas de clubes de fútbol. “La idea es desmovilizar y que la zona sea transitable. No quita igualmente que sea probable que se corten las calles si la gente no entra en la plaza del Congreso”, expresan en Nación.
La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y la Unión General de Asociaciones Sindicales de Trabajadores del Transporte (UGATT) ya anunciaron que acompañarán la convocatoria de los jubilados. Lo mismo aplica para el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA), los universitarios, docentes y taxistas, entre otros.