Otra de las caras del aumento en la recaudación del impuesto a las Ganancias es que también tendrá un importante impacto en las cuentas de las provincias. Para dimensionar la importancia de Ganancias para las cuentas provinciales hay que saber que el 57% de lo recaudado por esa vía se destina a las provincias. En números concretos, serían unos $3.307.171 millones.
Este panorama toma más relevancia después de los fuertes ajustes que el gobierno nacional viene aplicando sobre las transferencias que se envían a las provincias. Tal como explicó este sitio, los giros discrecionales a las provincias se recortaron por encima del 80% en abril.
Las transferencias que realiza la Nación a las provincias podrían resumirse en dos: las automáticas y las no automáticas. Las primeras son aquellas que surgen de leyes que fijan un porcentaje sobre un impuesto nacional y se reparten entre las provincias. En tanto, las no automáticas responden a criterios discrecionales por los cuales el gobierno nacional asiste a las provincias para cubrir necesidades, ya sean corrientes (para financiar gastos diarios) o de capital (vinculados a gastos de inversión, obras o compras de bienes).
Estos últimos envíos de fondos son los que sufrieron mayores recortes. Según la consultora Analytica, en la comparación en abril, el gasto primario real devengado tuvo una caída del 23,1% en la comparación interanual. Entre las partidas devengadas -es decir, los compromisos asumidos, aunque no necesariamente cancelados- con mayores ajustes reales figuran las transferencias a provincias (-86,1%), seguidas por la obra pública y las transferencias a programas sociales.
De igual manera, la consultora Politikon Chaco estimó que las transferencias no automáticas devengadas a las provincias totalizaron $35.855 millones, lo cual equivale a una caída real del 88,9%, superior a la de los tres primeros meses del año y representa el valor más bajo en 27 meses.