Una de las hermanas de Fabiola Yañez, Tamara, declaró este lunes en Comodoro Py en la causa por violencia de género contra Alberto Fernández. Fue citada por el fiscal federal Ramiro González a pedido de la abogada querellante, Mariana Gallego. En su testimonio habló sobre el embarazo que la ex primera dama interrumpió por pedido del expresidente y admitió que vio “como Alberto la zamarreaba”.
Del mismo modo, la hermana de Fabiola indicó que la vio con el “ojo morado” durante un viaje a Misiones. En este sentido, contó que una mañana le llevó el desayuno a la cama y ahí notó el golpe. Cuando le preguntó qué había pasado, Yañez le dijo que “había discutido con Alberto, que era de noche en la cama y que le haía pegado un manotazo”.
Sobre ese día, Tamara comentó que la ex primera dama le comentó que habían peleado “por lo mismo de siempre”, en referencia a problemas que tenían por otras mujeres.
También aseguró que el expresidente ejercía “violencia verbal constante” contra su hermana y que una vez vio cómo Fernández “la zamarreó” frente a la habitación presidencial.
La hermana de Yañez llegó esta mañana a los tribunales. Si bien aún restan que declaren la madre de Fabiola, Miriam Verdugo, y su examiga, Sofía Pacchi, la fiscalía ya tiene previsto convocar luego a una nueva ronda de testigos.
Tamara Yañez contó que hasta 2016 Fabiola tenía “una vida normal” y que planeaba tener un hijo. A los pocos meses quedó embarazada. “Alberto le dijo que no iba a poder ser, que lo tenía que suspender”, haciendo alusión a que tenía que practicarse un aborto. “Ellos no se cuidaban, sabíamos que podía pasar el embarazo”, agregó.
También dijo que desde el inicio de la relación “se notaban los malos tratos de Alberto a Fabiola”. Según su declaración, un día llamó al expresidente para recriminarle esos hechos, a lo que Fernández le respondió: “Sos una pendeja impertinente, con vos no hablo”, y le cortó el teléfono.
En medio de esta situación de violencia, recordó que Alberto llamaba a su mamá para pedirle que hiciera volver a Fabiola de Londres, a donde se había ido luego de una separación.
Cuando Fabiola y Alberto Fernández volvieron, Tamara reveló que la familia recibió de la peor manera la noticia. “Habíamos estado intentando por años sacarla de ese lugar. Nosotros sabíamos cómo era la cuestión, como él se manejaba, que él la menospreciaba”, sostuvo.
Sobre el moretón en el ojo de su hermana, la mujer confirmó que se trató de un golpe en medio de una discusión con su pareja. En junio de 2021, Tamara vivía en Misiones. Después de una actividad oficial, Fabiola fue de noche para su casa. Al día siguiente, cuando entra a la habitación, la vio con el ojo morado. “Todavía no estaba negro”, aclaró.
Cuando ella le preguntó qué había pasado, le respondió: “Discutí con Alberto. Era de noche y estaba en la cama. Alberto me pegó un manotazo”. Tras ello, dijo que se maquilló para salir sin que se le notara el ojo morado.
En ese contexto, afirmó que era habitual la violencia: “Siempre la hacía callar. La dejaba atrás al caminar, inclusive en actividades oficiales. Hostigamiento, maltrato, siempre hubo”, dijo la testigo.
Además del episodio de Misiones, contó otro suceso en el chalet presidencial, donde hubo gritos muy fuertes de Alberto y agarrones. “La agarró del brazo y se la llevó a su habitación”, detalló.
Del mismo hecho, puntualizó que Fabiola se encerraba en la habitación que fue de Francisco, su hijo, mientras Alberto le gritaba de afuera. Tamara lo escuchó por teléfono. “Estaba como loco”, recordó.
La testigo además fue consultada por la fiesta de cumpleaños que festejó en Olivos, en plena pandemia. Dijo que el expresidente culpó a Fabiola por la filtración de la foto que sacaron esa noche, y que eso la perjudicó. “La tenían encerrada. Le cortaban las actividades. Ahí es cuando empeora su cuestión personal porque se la pasaba encerrada”, enumeró.
Tamara Yañez declaró que Alberto responsabilizó a su hermana también de haber perdido las elecciones de 2021, y describió que era una persona que siempre se jactaba de su poder como Presidente. “Siempre había que darle la razón”, finalizó.