El Senado -donde objetivamente los números son más pequeños que en Diputados, pero también es más grande la influencia del kirchnerismo duro-, volvió a acelerar. Le puso fecha a la constitución de las comisiones y al tratamiento de los proyectos que el Ejecutivo incluyó en extraordinarias y la vicepresidenta Victoria Villarruel busca darle a Javier Milei la primera ley sancionada en su Gobierno. La semana que viene comenzará en la Cámara Alta el debate de la Boleta Única Papel, que ya tiene media sanción de la Cámara Baja y está frenada en el Congreso hace dos años.
De las iniciativas que el Presidente incluyó el temario para las sesiones extraordinarias, el grueso ingresó por Diputados, que el miércoles recibió formalmente el mega proyecto de reforma, conocido como Ley Ómnibus, y que se llevará la mayor parte de la atención parlamentaria del próximo mes. Para el Senado quedó, en cambio, la Boleta Única y una serie de convenios bilaterales.
La Cámara Alta ya definió su agenda para la semana que viene. El miércoles 3 de enero, se constituirán cuatro comisiones: Relaciones Exteriores, Presupuesto y Hacienda, Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales. Esto es, formalmente se reunirán su miembros y definirán sus autoridades. Asuntos constitucionales quedaría presidida por un senador de la bancada de Unidad Federal (PJ no kirchnerista) y el resto por senadores libertarios.
Apenas constituidas, RR.EE y Presupuesto tratarán esa misma tarde los convenios y acuerdos internacionales con Luxemburgo, Japón, China, Emiratos Árabes y Turquía. Mientras que un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales debatirá el proyecto de Boleta Única.
Fuentes oficialistas y opositoras indicaron que la intención es tener un dictamen listo ese mismo miércoles, para pasar al recinto siete días más tarde, el jueves 11 de enero, en lo que podría ser la primera sesión del año y un segundo triunfo parlamentario en la Cámara Alta desde el cambio de Gobierno. Pero hasta este jueves, más allá de las intenciones, no había confirmación y dependía primero de que todo saliera según lo previsto por el oficialismo para la semana que viene.
El proyecto para establecer la Boleta Única como método de votación en elecciones nacionales fue aprobada a principios de junio del 2022 en Diputados, en una sesión en que casi toda la oposición se unió y logró, ante el rechazo del entonces Frente de Todos, logró reunir 132 votos a favor. La iniciativa pasó inmediatamente al Senado, donde entonces mandaba Cristina Kirchner, el kirchnerismo controlaba las comisiones y donde no avanzó ni un centímetro.
Unión por la Patria, ex Frente de Todos, sigue manteniendo un gran peso en el Senado, es la primera minoría con 33 miembros, cerca de la mayoría de 37 senadores necesaria para el quorum. Pero el escenario mutó con el cambio de gobierno. El 13 de diciembre, todos los demás bloques se unieron y armaron una mayoría circunstancial de 39 senadores para quitarle al PJ-K no solo el control de la Cámara -al designar todas sus autoridades- sino también del control de las comisiones, al aplicar la misma mayoría para su integración y conducción.
Cómo está el escenario para la Boleta Única en el Senado: ¿Puede haber cambios?
El grupo de los 39 -que el kirchnerismo denominó “grupo motosierra”- es bastante heterogéneo: La Libertad Avanza tiene 7 senadores; la UCR tiene 13; el PRO está integrado por 7, Cambio Federal cuenta con 4 miembros (ex Juntos por el Cambio y legisladores alineados con gobernadores); Unidad Federal con 3 (PJ no kirchnerista), Innovación Federal con otros 3 (los misioneros Carlos Arce y Sonia Decut y la rionegrina Mónica Silva, que responden a fuerzas provinciales) y Por Santa Cruz está conformado por 2 legisladores que responden al mandatario local Claudio Vidal.
Si Unión por la Patria mantiene su postura de rechazo, como ya anticipan en la bancada que hasta hace tres semanas era el oficialismo, entonces los números para la aprobación de la Boleta Única deberán salir de esos 39 senadores. Según indicaban en la Cámara Alta, con el apoyo garantizado de LLA, el PRO, la UCR, Cambia Federal y la rionegrina Silva -considerando que su espacio votó a favor en diputados-, las mayores dudas estaban en que harán los dos misioneros y los dos santacruceños.
El gobernador Vidal se reunió la semana pasada con Villlaruel y tiene su propia disputa con el Ejecutivo nacional por la falta de una recomposición de la pérdida de recursos que supuso para las provincias la virtual eliminación de Ganancias.
Unidad Federal está integrado por el entrerriano Edgardo Kueider y el correntino Carlos “Camau” Espínola -que respaldaron la candidatura de Sergio Massa cuando el exministro entró al balotaje con Javier Milei- y la cordobesa Alejandra Vigo, esposa del exgobernador y excandidato a presidente Juan Schiaretti. Como se dijo, Kueider presidiría una de las dos comisiones que tratará el tema la semana que viene, Asuntos Constitucionales. En la bancada del peronismo federal anticipaban una mirada positiva sobre el proyecto en términos generales. Pero no estaba confirmado el apoyo en un 100% sin modificaciones.
Por otra parte, vale recordar también que Juntos Somos Río Negro acompañó la Boleta Única en Diputados en el 2022, pero al llegar a la Cámara Alta, el entonces senador Alberto Weretilneck -que hoy gobierna la provincia- también planteaba la posibilidad de realizar cambios.
Entre otras cosas, el proyecto habilita instalar en la Boleta un espacio en blanco para votar lista completa, lo que algunos consideran que es perjudicial para los partidos provinciales o partidos pequeños que no suelen llevar candidato a Presidente en las elecciones.
Ahora bien, si el proyecto recibiera modificaciones en el Senado, deberá regresar a la Cámara de Diputados, donde es probable que durante todo el mes -y quizás más-la discusión se concentre en la Ley Ómnibus. Si fuera aprobado sin modificaciones, se convertiría en ley, la primera durante la gestión de Javier Milei.