Durante 2021, el Frente de Todos gozó de su segundo año con mayoría propia en el Senado, presidido por Cristina Kirchner, situación que le permitió imponer su agenda sin dificultades y convocar a los debates sin preocupaciones por el quórum.
Sin embargo, como sucede en años electorales, la Cámara alta bajó el ritmo de su actividad: se realizaron 15 sesiones dentro del recinto, lo que representa la mitad -menos una- de las registradas en el año anterior, cuando se contabilizaron 31.
De acuerdo al relevamiento elaborado por parlamentario.com cada año, la cifra es superior a la de 2019, marcado por las presidenciales, cuando el Senado solamente se reunió en 10 oportunidades. Y para encontrar un número idéntico a 15 hay que ir hasta 2018, que no tuvo comicios.
Gran parte del año, la Cámara alta sesionó -por decretos de CFK- de manera remota, con la participación de un puñado de legisladores dentro del recinto. En octubre, en medio de muchas reaperturas, la Presidencia dispuso la vuelta a la presencialidad.
Sin número suficiente, en 2021 la oposición nunca convocó a una sesión por cuenta propia, por lo que no hubo sesiones en minoría, como ocurre esporádicamente en la Cámara de Diputados. Habrá que ver en 2022 si esta posibilidad se concreta -incluso con la chance de reunir el número necesario de 37 presentes-, ya que Juntos por el Cambio abultó su tropa, producto de los resultados electorales, en 33 miembros. Necesitará en ese caso la asistencia perfecta y el acompañamiento de los otros cuatro senadores restantes, de los cuales dos juegan como aliados del oficialismo. Complicado.
La última sesión que justamente realizó el Senado fue con la nueva composición parlamentaria, que encuentra al Frente de Todos con dos senadores por debajo del quórum: pasó de 41 legisladores a 35. Pese a tener una baja por un caso de Covid, el oficialismo alcanzó el número para habilitar la sesión gracias a sus aliados y una exintegrante de JxC.
Fuente: Parlamentario