Al responder preguntas de estudiantes del Instituto de Estudios Políticos de París, donde brindó una conferencia sobre el futuro de las relaciones entre América Latina y Europa, el presidente ratificó su compromiso con la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo y confirmó que el Gobierno presentará un proyecto propio en el Congreso.
“En la Argentina el aborto es un delito. Es un extraño delito donde casi nunca se condena a ninguna mujer por aborto pero todos sabemos que existe. ¿Cuál es el problema de que exista? Que todo aborto se vuelve clandestino y en la clandestinidad el riesgo de vida y de salud de la mujer aumenta”, observó el presidente, que, en este sentido, sostuvo que el problema es más agudo “de acuerdo a la clase social de quién practica el aborto. Si es de clase alta, lo hará en un centro de salud adecuado, en condiciones adecuadas y el certificado médico dirá que tuvo una aborto espontáneo y su salud estará garantizada”.
Por esto, manifestó que va a mandar una ley “que termine con la penalización del aborto y permita la atención de cualquier aborto en cualquier centro público”.
Asimismo, advirtió que “una mujer sin recursos toda su vida corre peligro. Y si zafa su vida, corre el riesgo de sufrir lesiones internas. Es parte de la discusión hipócrita que se tuvo con el divorcio, durante años discutimos si se podía volver a casar”, y remarcó que “no vivo en paz con mi consciencia sabiendo que una mujer tiene que realizarse un aborto, no tiene la posibilidad económica y termina en manos de un curandero que con una aguja la termina lastimando o matando”, cuyo comentario fue recibido con aplausos en el auditorio.
Así, el proyecto sobre la despenalización del aborto volvió a colarse en la agenda por segunda vez durante la gira presidencial, luego de que, hace unos días, el tema generara algún contrapunto con el Vaticano, cuando en conferencia de prensa, luego del encuentro con el papa, Alberto Fernández asegurara que no se hablo del tema, mientras que el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, afirmó que con él se habló respecto a “la protección de la vida desde su concepción”.
En tanto, desde la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito calificaron de “auspiciosa” la confirmación del Ejecutivo de enviar un proyecto que “reconozca el derecho a decidir sobre nuestras vidas y libertades como mujeres”.
Fuente: Parlamentario