Por primera vez en la historia el Parlamento abordó el año pasado el tratamiento de la interrupción legal del embarazo. Fueron decenas de audiencias, con la participación de cientos de invitados y dos maratónicas sesiones en ambas cámaras con resultados diversos: aprobación en Diputados y rechazo en el Senado. Quedó la expectativa para que con una composición diferente en ambas cámaras el resultado pueda variar en 2020.
Sin embargo desde la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito se anticipó sobre el final del año pasado que volverán a presentar el proyecto este 2019, sin esperar a una nueva composición del Parlamento. Por el contrario, insistirán en exigir la definitiva sanción de la ley en ambas cámaras y su promulgación por parte del Poder Ejecutivo. Las multitudinarias marchas del viernes pasado en las que el aborto legal fue una de las principales consignas sirvieron para alentar su tratamiento parlamentario.
Un proyecto no puede volver a tratarse durante el año parlamentario, pero sí al siguiente, aunque sectores que alentaron la aprobación del aborto aclararon oportunamente a parlamentario.com que “tiene poco sentido cuando vos tenés la misma composición de la Cámara”.
“Le veo poco sentido, pero sí me parece que es un tema que se va a seguir discutiendo socialmente, y que es muy probable que vuelva a formar parte de la agenda legislativa pronto”, confió una de las legisladoras “verdes” que más se movió en el oficialismo para aprobar el proyecto.
Pero a partir de lo anunciado por la corriente que promueve el aborto, el diputado del Pro Daniel Lipovetzky confirmó que este mes se presentará nuevamente el proyecto y que trabajarán para reunir más firmas de apoyo. Presidente de la Comisión de Legislación General y por ello encargado de conducir los debates en la Cámara baja, Lipovetzky sugirió que el proyecto tendrá seguramente algunas modificaciones respecto del debatido durante este año, que tendrán que ver con las consideraciones que surgieron de los plenarios, y puntualizó que su presentación pretenderá “dar una señal” a “millones de mujeres y argentinos en general que realmente quieren que avancemos con una ley de estas características”.
Pero está claro que la presentación no garantiza en modo alguno su aprobación -pues el Senado sigue estando integrado por los mismos legisladores que lo rechazaron por 38 votos contra 31-, y ni tan siquiera su tratamiento en comisión. De hecho, una encumbrada fuente del oficialismo descartó que el proyecto pueda ser tratado nuevamente este año.
“No, de ninguna manera, no creo”, fue la respuesta de esta calificada fuente que advirtió que hay “varias maneras” para frenar una iniciativa que admitió que le generó “daño” al bloque oficialista de la Cámara baja, donde muchas relaciones se tensaron a partir de las diferencias de criterios en torno al tema. La fuente señaló que el año pasado el tratamiento se hizo posible porque “hubo un acuerdo en comisiones para avanzar”. En cambio “este año no lo hay”.
Deslizó que por ejemplo “hoy sería difícil” su tratamiento en la Comisión de Salud que dirige la diputada del Pro Carmen Polledo, una de las cuatro que trató el proyecto antes de su llegada al recinto. Esa comisión “va a estar cerrada” al tratamiento de ese tema, garantizó el legislador.
Con todo, desde los sectores que rechazan el tratamiento del proyecto de legalización del aborto advierten que en caso de que llegara de todas maneras a abordarse, “el que más va a perder será el oficialismo”. En ese sentido alertaron que habrá muchos legisladores que “no van a aguantar que otra vez el Gobierno juegue con esto, de manera que creo que no le conviene en el comienzo de un año electoral”.
“Aparte, yo creo que el oficialismo ha notado que el más perdedor de todos en este debate fue el Gobierno… A pesar de lo que decían en ese momento”, concluyó la fuente consultada.
Fuente: Parlamentario.com