Kelyn Spadoni, de 33 años, fue arrestada en Nueva Orleans, Estados Unidos, acusada de negarse a devolver más de 1,2 millones de dólares que habían sido depositados por error en su cuenta bancaria.
La mujer fue acusada de robo valorado en más de 25.000 dólares, fraude bancario y transmisión ilegal de fondos monetarios, informó CBS12.
Pero no todo quedó allí, ya que después de ser detenida, la oficina del alguacil de la parroquia de Jefferson, donde trabajaba como operadora de emergencias, tomó la decisión de despedirla de su trabajo.
Todo ocurrió porque la corporación de servicios financieros Charles Schwab & Co debía transferir en febrero la pequeña suma de 82 dólares.
Sin embargo, por un error administrativo, lo que depositaron en la cuenta terminó siendo la enorme cantidad de 1.205.619 dólares.
Como era de esperar, la entidad cumplió con los pasos necesarios para recuperar el dinero, pero su solicitud fue rechazada debido a que el monto de dinero ya no estaba disponible.
Fue cuando comenzó una investigación, que puso a Spadoni en la mira y descibrieron que la mujer había transferido los fondos a otra cuenta.
La oriunda de Nueva Orleans no demoró y casi de inmediato gastó parte del dinero que había aparecido en su cuenta. Con parte de la suma se compró una nueva casa y un fabuloso automóvil 0 kilómetro: un Hyundai Genesis 2021.
El capitán Jason Rivarde, portavoz del alguacil local, sostuvo: "Ella no tiene ningún derecho legal a ese dinero. Incluso si se colocó allí por error. Fue un error de contabilidad".
Según fue dado a conocer, la corporación logró recuperar el 75 % del dinero.
Fuente: Minuto Uno