El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó que se activaron órdenes judiciales y de la fiscalía para capturar a los involucrados en una supuesta operación terrorista a la cual calificó como “conjura sangrienta”. Según su acusación, quien encabeza esta organización es el mandatario interino designado por el parlamento, Juan Guaidó.
Ayer, durante un acto en la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), el mandatario ya se había referido al líder opositor López y su "subordinado", Guaidó, como un “un monstruo fascista, psicópata, que ha estado 20 años detrás de todos los hechos golpistas, violentos, siempre. Lleva la violencia en la sangre, es un enfermo mental de la violencia y un ladrón además".
La conjura fue desvelada originalmente este sábado por el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, quien informó que los organismos de seguridad habían desarticulado un plan terrorista encabezado por López -que en la actualidad está en calidad de huésped en la residencia del embajador español en Caracas-, Guaidó y el Gobierno del presidente colombiano, Iván Duque.
Maduro completó este domingo esos datos y agregó que dichos ataques iban a tener lugar "en varias ciudades del país para provocar un baño de sangre militar, popular y ensombrecer y bañar de sangre las navidades y las festividades del pueblo de Venezuela en este 2019".
Frente a ello, aseguró que "gracias a la cooperación civil, policial y militar" lograron detectar y desactivar el plan. En este sentido, reveló que el viernes la Cancillería recibió una llamada del encargado de negocios de la Embajada de EE.UU. ante Venezuela, que opera de forma virtual, James Story, a quien acusó de ser el "encargado de la conspiración".
Fuerte: Diario Popular