La vacuna de Pfizer contra el COVID-19 funciona en niños entre 5 y 11 años, según anunció el lunes la compañía, que pedirá pronto la autorización en Estados Unidos para esa franja de edad, un paso clave para iniciar las vacunaciones en menores.
La vacuna fabricada por Pfizer y su socio alemán BioNTech ya está disponible en Estados Unidos para personas de 12 años en adelante. Pero ahora que los niños regresaron a la escuela y la contagiosa variante delta del virus causa un gran aumento de los contagios pediátricos, muchas familias esperan con ansiedad la oportunidad de vacunar a sus hijos más pequeños.
La farmacéutica probó una dosis mucho menor para los niños de ese tramo de edad, un tercio de las dosis administradas hasta ahora. Sin embargo, tras la segunda dosis, los niños de entre 5 y 11 años mostraron niveles de anticuerpos para combatir al coronavirus tan fuertes como los de adolescentes y adultos jóvenes, indicó a The Associated Press el doctor Bill Gruber, vicepresidente senior de Pfizer.
La dosis reducida también se mostró segura, con efectos secundarios temporales -como molestias en el brazo, fiebre o dolor- similares o menores a los de los adolescentes, señaló.
Cómo fue el estudio de Pfizer en menores
El estudio de fase 2/3 incluyó a 2.268 participantes que tenían de 5 a 11 años y recibieron un nivel de dosis de 10 µg en un régimen de dos dosis administrados con 21 días de diferencia. ”Las respuestas de anticuerpos en los participantes que recibieron dosis de 10 µg fueron comparables a las registradas en un estudio anterior de Pfizer-BioNTech en personas de 16 a 25 años de edad inmunizadas con dosis de 30 µg”, describieron en el comunicado.
En este sentido, añadieron que “la dosis de 10 µg se seleccionó cuidadosamente como la dosis preferida por seguridad, tolerabilidad e inmunogenicidad en niños de 5 a 11 años”. ”Estos son los primeros resultados de un ensayo fundamental de una vacuna Covid-19 en este grupo de edad”, completaron.
El plan de vacunación en la Argentina, la disyuntiva con la Pfizer: inocular a adolescentes o aplicar segundas dosis
Uno de los principales objetivos que se planteó el Gobierno en la campaña de vacunación aún está lejos de cumplirse: inmunizar a todos los adolescentes con factores de riesgo, una población que el Ministerio de Salud de la Nación estimó en 900 mil personas.
El ritmo lento de aplicación, que en Salud le explican a TN.com.ar tiene que ver con que muchos padres aún no accedieron a vacunar a sus hijos, provocó que una parte de las dosis de Moderna asignadas para este grupo se destinen a completar esquemas de segundas dosis de las Sputnik V. Es que entre las autoridades de Salud ronda esta disyuntiva: si un adolescente no quiere vacunarse, ¿esa dosis se debe reservar para cuando así lo decida o rápidamente se debe destinar como segunda dosis de otra vacuna?
En este contexto, la última semana se distribuyeron las primeras 100.620 dosis de la vacuna del laboratorio Pfizer, que al igual que Moderna está autorizada para su aplicación en menores de entre 12 y 17 años con y sin factores de riesgo. El Gobierno argentino firmó un contrato por 20 millones de sueros con este laboratorio. “Las mismas estarán destinadas a adolescentes”, aseguraron desde el Ministerio de Salud, pero lo cierto es que, más allá de la recomendación de la cartera que conduce Carla Vizzotti, cada jurisdicción luego decidirá el destino final de estas. A modo de ejemplo, en la Ciudad estas vacunas se destinarían como segundas dosis, mientras que en la Provincia de Buenos Aires se inmunizaría a adolescentes sin factores de riesgo. En ambos casos la decisión aún está en análisis.
La discusión respecto a si la prioridad debe ser completar los esquemas de vacunación o inocular a los adolescentes se produce en medio del avance de la variante Delta de coronavirus, un linaje que si bien aún no es predominante comienza a encender las alarmas por brotes en diferentes puntos del país, como el caso de la escuela ORT en plena Capital Federal. Las posturas son claras: un grupo asegura que se debe proteger a los adultos mayores de esta cepa, mientras que otros afirman que para cortar la circulación del virus se debe lograr la inmunización de rebaño, es decir, vacunar con al menos una dosis al 90% de la población, lo que incluye a las adolescentes.
Fuente: TN