Agostina, la líder de la semana en la casa de Gran Hermano, tuvo que hacer uso de su beneficio en una semana atípica para la competencia. La expolicía ganó el liderazgo por primera vez desde que está en la casa y tuvo que tomar la complicada determinación: subir a un compañero a la placa de nominados y salvar a otro.
Por esta semana, todos los participantes de la casa estaban en placa desde un principio porque en esta ocasión el voto de los televidentes es positivo. Es decir, tienen que votar por quién quieren que se quede. Sin embargo, hubo excepciones: Agostina, por ser la líder, tiene inmunidad y, tras la gala de nominación y el voto positivo también de los participantes, Nicolás, Lucía y Joel también estaban libres de la gala de nominación.
La líder de la semana tenía que sacar a uno de los salvados y nominarlo, y poner a otro compañero en la "zona segura" y sacarlo de la placa. Así las cosas, Agostina comunicó que iba a nominar a Nicolás por una cuestión de afinidad. Así, el joven volvió a la placa y necesita que sus seguidores voten por él para asegurarse la continuidad en la casa.
Finalmente, Agostina tenía que comunicar a quién salvaba y dio a conocer su determinación. La participante decidió salvar a Juliana "Furia", aunque no decidió dar explicaciones al respecto, tienen un gran vínculo con la participante y son las únicas dos que quedan del grupo de "las furiosas".