El Festival del Cosechador es un evento tradicional en Mendoza. Desde hace 30 años, el festejo se celebra en la localidad de Gustavo André, en el departamento de Lavalle. Allí, hay una comisión que trabaja a destajo y muy responsablemente para organizar este festival con el propósito de celebrar el fin de la cosecha. Y quisieron que el regalo para todos los cosechadores en su celebración fuese uno de los músicos populares más importantes del país: Chaqueño Palavecino.
Este fin de semana, el Festival del Cosechador tuvo la siguiente cartelera el día sábado: El Negro Tecla, La Kuppé, Los Irusta, Huayras Lavallinos, Altos Chiflados, Sin Partituras, Miguel Miranda, La 14, Perros de la Vereda, La Diferencia y Akiles. Por su parte, el domingo subieron a escena: Daniel “El Negro” Ferreyra, Los Videla, Mateo Villegas, Nativos, Mendukos, Vientos del Norte, Turrón Juárez (humorista), Marca Registrada y el gran cierre fue para el Chaqueño Palavecino.
Y fue precisamente en este punto donde aparecen las quejas. La presencia del salteño estaba prevista para la medianoche pero recién hizo su aparición pasadas las 2.30 de la madrugada del lunes. Desde luego que esto alteró a los presentes que sentían que la demora no tenía sentido y, además, este lunes deberían madrugar por distintas actividades. Muchos de los presentes no dudaron y se fueron; y los que se quedaron tuvieron que soportar el paso de los minutos.
Uno de los que puso cuerpo y alma para hacer que ese bache no fuese tan duro fue el humorista Turrón Juárez y otro tanto hicieron los conductores del evento.
Una vez que el artista subió al escenario lavallino (no se lo vio en las mejores condiciones) empezó el recital que duró cerca de una hora y veinte minutos. Allí, el Chaqueño se apoyó permanentemente en sus músicos y fueron ellos quienes llevaron la voz cantante más de una vez. Y, en un momento determinado el renombrado artista invitó a subir a Daniel “El Negro” Ferreyra para que lo acompañara y, finalmente, fue quien levantó a la concurrencia.
A la hora del cierre el lugar -que llegó a albergar unas diez mil personas- estaba casi vacío y las quejas se empezaron a hacer sentir tanto por el horario pactado incumplido como por la pobreza artística.
Este lunes, comisión directiva del Festival del Cosechador emitió un comunicado pidiendo disculpas por todo lo sucedido y habló de “situaciones ajenas a esa comisión”. Pero basta con darse una vuelta por las redes sociales como para leer y entender el enojo de los que fueron al evento con la intención de disfrutar de uno de los mayores artistas populares que tiene el país y encontrarse con una figura carente de voz y tratando de “sacar” un show adelante.
Fuente: Sitio Andino
