En Salta se desarrollaron las elecciones legislativas, y más allá de los resultados y de quienes ocuparán los cargos por los próximos dos años, hay una realidad que no debe obviarse.
El voto en blanco fue el gran protagonista de la jornada.
En la categoría Senador, por ejemplo, si se contabilizara al "voto en blanco" como un candidato, se podría decir que obtendría el tercer lugar, con el 12,41% y más de 33 mil votos.
En Diputados sería la cuarta fuerza, con 12,15%, y hasta le correspondería ocupar una banca, y quizás dos.
En la categoría Concejal ocurre casi lo mismo. Con el 13,07% de los votos, sería la segunda fuerza, y también tendría varios cargos en el recinto deliberativo.
Esto claramente expone el malestar y cansancio de la ciudadanía con los políticos, un mensaje que debe ser escuchado