Una vez más ganó la violencia en el fútbol salteño. Otra vez las barras bravas, le privaron al verdadero hincha, que paga su entrada, de disfrutar de un espectáculo deportivo.
Apenas había arrancado el cotejo entre Gimnasia y Tiro y Central Norte por la final del cuadrangular de verano, un nuevo enfrentamiento se dio en un sector de la popular Norte del estadio Padre Martearena, donde estaba ubicada el grueso de la barra del cuervo. La policía, tuvo que actuar rápidamente para que las cosas no pasen a mayores. Aunque fue inevitable que los violentos ubicados en la tribuna norte dejaran continuar el partido. Increíblemente, a pesar de los serios desmanes no hubo detenidos.
Viejas diferencias de al menos cinco facciones y las amenazas cruzadas en la previa del partido, llevaron a que inadaptados una vez lastimen al fútbol.
Ambos equipos jugaban el último partido del Cuadrangular de Verano 2022, que tiene como premio 500 mil pesos. Recién el lunes se sabrá la resolución de la Liga Salteña.