Los cuatro últimos partidos del Mundial de Qatar 2022, se disputarán con un nuevo balón, denominado Al Hilm, que significa "El sueño".
Al Hilm toma el relevo de Al Rihla ("El viaje"), que se ha usado en los sesenta primeros encuentros de la primera cita mundialista en un país de Oriente Medio. El balón se estrenará en los encuentros de la Selección Argentina con Croacia y de Francia ante Marruecos.
Con un diseño gráfico diferente, Al Hilm también dispone de la tecnología vinculada a la detección del fuera de juego que permite adoptar las decisiones al respecto de forma más rápida y certera.
La nueva tecnología combina la inteligencia artificial con los datos que proporciona la unidad de medición inercial (IMU, por sus siglas en inglés) situada en el centro del balón. Al vincularse al sistema semiautomatizado para la detección del fuera de juego, permite comprobar el momento exacto en el que se juega el balón en situaciones ajustadas de posición antirreglamentaria.
Según la marca de la pelota, el diseño está estudiado para respetar el medio ambiente. De hecho, es el primer balón de las semifinales y la final del Mundial fabricado exclusivamente con tintas y pegamentos de base acuosa.
El fondo dorado y los sutiles motivos triangulares se inspiran en los desiertos que rodean la ciudad de Doha, el color del trofeo de la Copa Mundial de la FIFA y el estampado de la bandera de Qatar.