Los jugadores recibieron la misiva y trasladaron la inquietud a los dirigentes del club, quienes, según El Tribuno, se apersonaron a la inmobiliaria e increparon a los trabajadores.
Ante esta falta de respeto, la inmobiliaria resolvió enviar una carta al presidente Javier Russo para denunciar la situación. "A raíz de la falta de respeto sufrida por un dirigente y la falta de pago de alquileres e impuestos, nos vemos en la obligación de informar la posibilidad de terminar la relación contractual".
Además, advirtieron que, de terminarse la relación contractual, el fin de semana deberán entregar las propiedades, lo que desencadenó en un fuerte malestar por parte del plantel que decidió no entrenar por el incumplimiento y la falta de compromiso de pago de los haberes; de los alquileres y servicios de las viviendas que habitan.